Esta semana, Manuel, me hacía la misma pregunta que me han repetido durante las últimas semanas otras personas, en varias ocasiones: entonces…. ¿El coaching es psicología?
La respuesta es NO. El coaching no es ni psicología, ni enseñanza, ni formación, ni mejor amigo, ni terapia, ni consultaría, ni counselling (consejo asistido), ni mentoring…

En el coaching trabajamos con el potencial de las personas y las empresas: nos preocupa lo que nuestros clientes son capaces de hacer, a dónde pueden llegar en el futuro y cuál es su momento actual. Ya que, nuestro potencial actual no es el definitivo, simplemente lo tenemos adecuado a las circunstancias actuales, pero si cambiamos nuestros objetivos, nuestro potencial crecerá.
El coaching es una forma avanzada de comunicación cuyo gran soporte es la conversación provocadora. Un coach tiene como principales cualidades: la escucha y el feedback. Escuchamos lo que el cliente dice y lo que no dice, hacemos las preguntas adecuadas, buscando claridad, y compartimos con el cliente lo que sabe y como se siente. El coach comparte sus pensamientos con el cliente con el propósito especifico de estimular un cambio deseado por el cliente (esto es lo que se define como feedback)
Sacamos la grandeza del cliente cuando le pedimos que piense, que actúe a lo grande, y cuando constantemente le pedimos que suba el listón y sus estándares. Lo provocamos para que salga de su área de confort, porque “si seguimos haciendo lo mismo, obtendremos los mismos resultados”. Trabajamos para que se sientan capaces de cualquier cosa, ¿Por qué andar cuando se puede volar?
Revelamos al cliente a sí mismo, con intención de que se conozca mejor para que sus decisiones sean mejores. Ayudamos al cliente a descubrir sus talentos, sus valores, sus necesidades, sus motivaciones, sus inspiraciones, sus sueños… de manera que hay un autocontrol, autocrecimiento y, lo más importante, el auto-descubrimiento. Invitamos al cliente a experimentar con nuevos modelos, formas de hacer las cosas, e incluso identificar nuevas metas o resultados.

Reconocemos la perfección en cada situación, buscamos reconocer que un suceso, problema, situación o característica es perfecta, aun cuando claramente no lo es. Una forma de ver la vida es creer que todo lo que sucede, sucede por una razón perfecta, incluso si no podemos ver o saber cuál es esa razón durante nuestra vida. Realmente, el coach ayuda a poner rumbo a lo más importante, ya que, nuestra naturaleza humana nos hace que nos desarrollemos en nuestras vidas con un crecimiento rápido y con cambios continuos.
Y por último, y no por ello menos importante, nos gusta hacer saborear la verdad. La verdad está a un nivel por encima de la simple honestidad, siempre hay una verdad sobre una situación, una persona o evento, que cuando se reconoce, puede transformar la vida o el negocio de una persona.
Resaltar también, que no emitimos juicios, y que con nuestra “no transferencia” de nuestra propia experiencia, permitimos al cliente que sea dueño y señor de sus propios pasos, de su propio sentir y por supuesto, de su propio proceso.

DELANTE DE UN COACH, TÚ PUEDES SER LA PERSONA QUE REALMENTE QUIERES SER. EL COACH TE PROPORCIONA LIBERTAD PARA ELLO

MARIA JOSÉ PADILLA

MARIA JOSÉ PADILLA

COACH PROFESIONAL

In Love, With Love… C’est tout!!