“La primera vez que vine a París fue con mi padre” (también mi madre) pero yo me quedo con estas palabras del anuncio de TOUS que tan bien definió mi aquella primera vez… rondaba el año 1995: “Quería que vieras París por primera vez con el único hombre que te querrá siempre, pase lo que pase”.

Paris es sin lugar a dudas LA CIUDAD. Lo escribo con mayúsculas porque es la ciudad del AMOR y solo por ello, hay que venir a visitarla, al menos una vez en la vida, antes de morir (eso dicen y yo lo reafirmo).

Voy a compartir con vosotras cosas que he hecho en París, que realmente han hecho que esta ciudad forme parte de mi vida, como lo hace. Y cosas que os animo a realizar en algún momento de vuestras vidas, si es con #REGALATEPARIS, mejor que mejor!

“Siempre nos me quedará París”… un mes en el arrondissement 17 de París. A dos paradas de la Torre Eiffel. Un mes de ver la torre todos los días. Año 2002.

No voy a dejar para el final el último momento especial que viví hace unos días (Marzo 2019), y que fue “mi primera vez sola en París”. Unos días para preparar #REGALATEPARIS. Quería vivir en primera persona las sensaciones que luego pueden formar parte de las chicas que quieran ser chica #REGALATEPARIS. Emociones a flor de piel en cada esquina de París. Ojalá te decidas a disfrutarla conmigo.

Me sale la sonrisa o mejor dicho las lagrimas, cuando vuelvo a recordar uno de los momentos más felices de mi vida. Comida en el restaurante de la Torre Eiffel (Abril 2018). Día especialmente soleado. Sensaciones y sentimientos en un mantel y a la mejor altura que se puede tener en París.

 

París y mejores amigas… súper planazo que pude vivir en Agosto de 2008 y en Septiembre 2017. Risas y más risas. Abrazos y más abrazos. Miradas, besos, y conversaciones que erizaban el corazón.

Llámame niña, pero cada vez que recuerdo el instante en el que la Torre Eiffel se ilumina con los brillis brillis, no puedo dejar de saltar como una niña que va a coger su helado preferido… Me flipa. Ya lo he dicho. No lo puedo evitar. (Especial en el año 2000). Yo le daría una vuelta a este párrafo, la expresión brillis brillis (son un palabro) y me “flipa”…… Ya sabes a mí no me gustan.

Alquilar una bici para pasear por el Bosque del Boulogne un día cualquiera del mes Junio 2011… no tiene palabras…

Celebrar mi 41 cumpleaños en París al más estilo Carrie Bradshaw, es celebrar de verdad un cumpleaños. Restaurante KONG (donde se grabó una de las últimas escenas de Sexo en Nueva York)… Nada más que añadir.
Sentir el frescor del césped mientras tomas una copa de vino acompañada de una tabla de quesos… es la magia de un piquenique (esto es un palabro) en los jardines de Versalles (año 2002).

Y para acabar, y no por ser el último en nombrar ni es más ni menos importante o intenso que los otros, la Navidad en París, acompañada de mi hijo y mi familia… Despedimos el año 2013. Las uvas tomadas mirando la Torre Eiffel. ¡Feliz! ¡Feliz! ¡Feliz!

Y escribiendo esto, vuelvo a sonreír, a soñar, a revivir y a emocionarme porque cuando una está enamorada… solo puede sentir esto hablando de su AMOR. París.

MARIA JOSÉ PADILLA

COACH PROFESIONAL

Organizo procesos de coaching en París.
Emotravel Planner.

#REGALATEPARIS